El fútbol de hoy, sin duda alguna ya no es el de antes.Hoy la obligación por ganar, por sumar, por ser campeones casi a cualquier precio, definitivamente a perforado de manera profunda las bases del buen juego. Ese juego brillante, dulce,amable, que provoca admiración, esta cada día mas lejos de un campo de juego.

Si bien, la estrategia, la táctica y los sistemas de juego son importantes para el desarrollo del fútbol, esto no es lo único.La pizarra,ha alcanzado un rol casi fundamental en el fútbol, y está bien,porque  ésta refleja una estructura, un orden,  una organización, o al menos intenta darle o construir una forma de juego a un equipo,mecanización la nombran algunos.¡Pero no es lo único!.

Las ideas a partir de la improvisación,no puede estar ajena en el desarrollo del juego. Es necesario generar las condiciones de confianza para que el jugador tenga la capacidad de crear. El improvisar no está en la pizarra, no esta predeterminado,eso no se trabaja.«A veces en la pizarra esta todo, menos lo que va a ocurrir en el juego»,dice J.M.Lillo.

Cuando la pizarra comience a ser venerada como el único camino para llegar al triunfo, en vez de la magia de las ideas, de esa creatividad innata, que regala el talento, para la admiración por ese buen juego, el propio fútbol con toda  su sabiduría se encargara de escribir mejores historias,  pero esta vez con mas improvisación que estrategia,porque el fútbol se juega en la cancha y no en el pizarrón.

 

Gatomontés.